'cookieOptions=learn o link La Cripta : 2013

sábado, 28 de diciembre de 2013

La Maldición de la Bella Durmiente

Eran aproximadamente las dos y media de la mañana, era un cuarto muy lujoso, llenos de detalles dignos de ser la habitación de un rey, pero de colores un poco más femeninos, el blanco pureza rodeaba el lugar, dando un aura de calma y dulzura casi como el de cuento de hadas, sino fuera por la mujer que se hallaba durmiendo, agitándose de un lado a otro en su cama, para nada se podía decir que era incomodidad, pues la cama claramente se veía muy agradable con almohadas de plumas, y de sabanas de una fina seda, la mujer no dejaba de dar vueltas, como si estuviese poseída,  la mujer de rubia cabellera estaba vestida de una pijama muy fina de gasa de una transparencia muy sensual, el clima era muy de verano, pero tampoco en excesivo caluroso, por lo que su malestar no era aquello, menos el frio o algo parecido, la joven, estaba probablemente teniendo una pesadilla, tal vez era eso, después de  este tan mal momento, la joven se levantó, presurosa y muy asustada, aunque la expresión rápidamente le cambio a una ira incontenible.
­— Mierda, otra vez, no puede ser —
La joven se levantó de un solo movimiento, dirigiéndose directamente al baño, se puso frente al espejo y prendió el grifo, se lavó la cara, sin mucho cuidado, algunas gotas caían sobre su pijama, aunque ella casi ni lo notaba.
—No pasara de nuevo, no esta vez, no caeré en el juego, ya no hay tal cosa como el no despertar —mientras sollozaba — estoy harta, un hora, solo una hora antes de volver a ver lo mismo, puta caja de cristal, maldita bruja, hada, hechicera, o lo que hayas sido, no volverá a suceder —
La joven entraba en un constante ir y venir de paranoias, volvía a reposar en su cama, pero la noche se hacía infinita, las horas se hacían extensas, y más cuando su cerebro captaba hasta el más mínimo estimulo, debido a su clara falta de sueño, cualquier ruido sea fuera o dentro de la habitación le molestaba, incluso se levantó para abrir su puerta y ver al pasillo, pero nada, el viento era lo único que podía estar incomodándole.
—Príncipe, donde estas, beso eso fue lo que me devolviste, aunque no, no fue un beso, sino esos mellizos con los que me desperté, que son mis hijos, aunque no lo recuerdo, príncipe fuiste un mal nacido igual que tus vástagos, no puedo seguir así me largo —
La joven se levantaba con una pequeña sonrisa maquiavélica en el rostro, ella sentía como si un perfume olor a muerte le rodease, una mirada a su repisa de madera donde su maquillaje y unas hojas de papel y un lienzo aguardaban.
—Esta noche, después de quinientas lunas, voy a decirle por fin adiós a tu maldición, no más horas sin sueño, ni sueños eternos, no más drama, no más deudas conmigo misma, no vas cadáveres putrefactos en mi alma, no más de cien y pico años vividos, los cuales casi todos pase dormida, no más de este amor y dolor, de esa espera a un hombre para salvarme, que en vez de ello aseguro su reino, siendo un sobrino nieto mío, no pagare más culpa de la que ya tengo, pero sobre todo no más sangre en mi venas, no más ideas en mi cabeza, no más remedios, no más voluntad para fingir que el feliz por siempre es una mera idea, mañana cuando me cuelguen, hagan por traición, porque prefiero desistir de mi misma a caer por la creencias de alguien más, ahora este es mi fin sin perdices, pero también sin cicatrices que curar —
Se ponía a redactar la joven princesa, sin parar, como si todas las palabras ya las tuviera pensando durante tiempo, y es que últimamente lo que más le sobraba tiempo, luego de terminar su carta, dejaba unos segundos para darle un duro golpe a su espejo que estaba enfrente suyo, con la mano sangrante, agarraba como si de una navaja se tratase, se hacía pequeños cortes pero profundos en sus muñecas, tan delicadas, que fácilmente pudo haber usado el mismo papel, la tez clara de su piel, pasaba a ser un mar de sangre, y lágrimas, ella con una expresión sombría, se desplomaba cayendo al piso, totalmente desnuda y tal como ella lo dijo sin gota de sangre en las venas, pero con la dignidad puesta, sin la inmortalidad de la vanidad que otra princesa que con un final feliz o no,  la bella ex durmiente, no quedara bajo ninguna sombra.




viernes, 6 de diciembre de 2013

Reunión de amantes

(Gemidos en el salon)
Narración: como termine jugándome la vida o la suerte, como empezó esta delicado relación fugaz y tal vez pasajera, si porque por mi naturaleza esto no durara una noche.
Como el placer es menor al riesgo cuando te sientes atraído, como el miedo es igual a disfrutar cuando las miradas no bastan, como el tacto influye sobre nuestros pensamientos y como las palabras eluden al raciocinio.
Esta es una de mis innumerables noches, más no es la más apasionada no es ni siquiera la más atrevida pero es en definitiva la mejor, ¿porque?, eso no importa, solo escucha y dejate llevar.
Transilvania 1814, reunión de Condes castillo.
Mozo: Señor Vlad le esperábamos desde hacía buen rato.
Vlad: Es cierto no es fiesta sin mí.
 Mozo: tan jocoso como siempre, le traigo algo de beber.
Vlad: pues no lo necesito aunque algo de vino no estaría mal.
Mozo: entendido señor, póngase cómodo los invitados de todos lados llegaron
Mozo se retira.
Vlad: así que gente muy grande y todos lados, ricos e importantes, pero se me antoja un manjar exquisito, una rubia tal vez.
Mozo: su trago señor, y por lo de la rubia, la señorita de la izquierda la hija de rey de Francia encaja con sus gustos Señor es joven, guapa y voluptuosa, más bella que el mismo atardecer.
  Vlad: hablas como si fuera lo más preciado del lugar, pues bien quiero conocerla, el resto dependerá de ella.
Mozo: adelante señor, la pista de baile será suya.
Vlad: mi talento son palabras no mis piernas.
Da unos pasos acercándose a la joven.
Vlad: conozco el latido de vuestro corazón alrededor de setenta pulsaciones por minuto, pero en este minuto solo deseo mencione su nombre.
Cristina: usted es el noble llamado Vlad, me sorprende verlo salir de su castillo.
Vlad: no soy ermitaño señorita, soy por el contrario un poco nocturno, pero bueno espero me halague mencionando mi nombre
Cristina: pues soy Cristina, señor Vlad
Vlad: gracias, era todo lo que necesito ahora sé muy bien, quien es usted.
Cristina: pero si solo le mencione mi nombre
Vlad: os lo explico, no es su nombre lo que anhelaba era su condescendencia y amabilidad, usted es una princesa, debería haberla saludado inclinándome, pero no, usted me respondió mi inquietud sin ningún reparo y lo hizo con buena intención es usted una señorita y muy noble.
 Cristina: y usted un señor de muchas palabras y de gran interés, me halaga pero también me hace ver atreves de mi misma.
Vlad: no, no puedo ver atreves de usted porque es pecado perderme en su mirada e inevitable que no deje de admirarla
Cristina: oh, me sonroja señor, creo que no es necesario que me seduzca de esa manera.
Vlad: ¿hay reglas?, pensé que solo charlábamos, señorita no parto con intenciones solo con proposiciones.
Cristina: entonces insinúa que imagino cosas
Vlad: no solo que las piensa, me gusta hablar con usted pero la música incomoda sígame en el tejado podemos seguir esto tranquilos.
Pasos hasta subir
Vlad: si aquí es, recuerdo muy bien este lugar, paseaba mucho con mi padre sobre todo en las noches, mira la luna esta bella hoy.
Cristina: es cierto, la luna y las estrellas creo que algún día el hombre llegara a ese lugar, volando
Vlad: tal vez el día que la luna no la irradie de más belleza Cristina
Cristina: no juega con sus palabras, tenga cuidado me está haciendo pensar diferente sobre usted.
Vlad: ¿Diferente?, ¿tanto cree conocerme?, es raro porque hace unos momentos era un extraño y ahora resulta que actuó de manera diferente a mi comportamiento normal.
Cristina: no, no me refería a eso, es solo...
Vlad: se pone nerviosa, eso quiere decirme
Cristina: eso, me hace sentir incomoda pero a la vez confortable aunque no debí decir lo último.
Vlad: no se preocupe, es normal es algo que llaman atracción, es natural, el problema que se detiene porque cree que es muy pronto.
Cristina: es como si usted comprendiera más mis emociones que yo, eso es agradable en usted Vlad.
Vlad: en parte, aunque verla es suficiente inspiración para ser agradable incluso un poco más
Cristina: no use términos que no será capaz de cumplir.
Vlad: soy muy capaz solo si usted me lo permite, he pensado que se ha pregunta alguna vez ¿lo que vale un beso?
Cristina: un beso, no creo que sea capaz de ponerle valor, es algo abstracto solamente se obtiene con amor.
Vlad: es cierto le llaman amor tal vez pasión, pero eso no es calificar valor, creo yo querida princesa que sí, un beso tiene valor puede ser cuantificado incluso medirlo según su intensidad.
Cristina: que cosas dices eso no es posible...
Narración: Sin aviso, sin interés, sin compromiso sin mi mente obedeciendo, la bese tan suave pero tan intenso, ella, no ya era ella era un nos, ambos yo fui el primero en dar el brazo a torcer pero ella daba más cada vez más, luego fui por sus botones, me deslice tan bruscamente que quizás le arranque uno o dos botones al vestido, pero no detuve no ella con una tenue voz pedía que parar (palabras de ella), pero no porque iba a parar si ella lo disfrutaba tanto como yo, entonces la vi tan pura y tan bella que decía este bocado lo disfrutare como si fuera el ultimo.
Cristina: Vlad tú eres el único que me ha visto de esta manera, por favor dime que serás el ultimo.
Vlad: seré hasta tu último aliento, lo juro.
Cristina: entonces, haz lo que tengas que hacer, llevate mi inocencia.
Narración: era un pecado, ella era lo último y lo más nuevo, no es imposible enamorarse en una noche, pero es tan posible apasionarse y luego olvidar, era lujuria, jugaba con su cuerpo, era la noche, era el clima pero sea como sea mi frío corazón incapaz de latir, jugaba con sus piernas, le hice hasta lo que no estaba escrito, ella suspiraba, jadeaba hasta pedía más,  su camino era tan dulce como el vino pero ella estaba tan sedienta como el mar sin la sal.
Cristina: Vlad tengo que olvidar esta noche, mi cuerpo no puedo evitar creer que alguien se enterara.
Vlad: nadie lo hará, pero nadie saldrá de acá, este lugar niña será tu tumba, te juro te amo y aunque es el problema te prometo no te olvidare, pues esta noche es de mis mejores noches, pero lo siento es tarde y me debo encargar de otros asuntos.
Cristina: de que hablas, no entiendo a qué te refieres.
Vlad: soy un vampiro, no soy el vampiro, el más temido Vlad es solo apodo, soy en conde Drácula, mira mis ojos, mira atentamente, mientras derramas la sangre de tu cuello.
Narración: que puedo decir no soy perfecto solo inmortal, seduzco niñas ricachonas para luego alimentarme de ellas, pero cristina era especial tenía que deshacerme de ella, no la volvería igual que yo no era mucho compromiso.
Gritos de Crisitina.
Mozo: veo señor que se divirtió mucho, me permite comerme los restos.
Vlad: adelante sírvete está muerta.
Mozo:(voz terrorífica y chillona) jajajaja, el amo es bueno, quiero todo, hasta el último hueso jajajaj



miércoles, 21 de agosto de 2013

Hermano (parte 1)

¡Au! Pegue un grito un poco suave, era mi hermano Cristian de nuevo levantándome de golpe en mi habitación, le gustaba hacerlo porque bueno siendo sincero eran las once de la mañana y el siendo un administrador en un parque industrial le incomodaba que su hermano menor fuese un poco flojo, bueno bastante flojo, era normal para mi saber que no era lo que esperaba del resto, no es que estuviera decepcionado de mi desempeño ni nada por estilo, en parte era todavía tenía confianza en mí ¿la razón?; aun no terminaba la universidad lo que significaba que por el momento había esperanzas.
—Levanta que no es verano, o es que no piensas estudiar —dijo mi hermano con desagrado pero algo nervioso —
—No es para nada ese tema, por el contrario, es que me toca muy tarde, pero que haces acá, ¿es que solo disfrutas de despertarme?, no tienes trabajo Cristian —pregunte sin reparo y mucho descaro.
—No es gracioso, estoy buscando unos papeles muy importantes, tenían el título de folder 005, era de manila de color verde y tenía una cinta que lo cubría por todo el lado izquierdo estaba dispuesto de forma vertical, ¿lo has visto? De verdad que lo necesito — preguntó con una expresión preocupada aunque forzosamente arrugaba el rostro para solo mostrar seguridad — No para nada, no he visto algo así — respondí automáticamente.
Pues bien mi habitación no era muy grande a penas una cama, un ropero pequeño, un depósito para mi ropa, un mueble donde estaba el computador y una mesa donde estaba la foto de nuestros padres los cuales no veíamos hace mucho tiempo, solo en ocasiones especiales llámese navidad, cumpleaños y poco más; lo cierto es que también no solíamos tener visitas por lo que si el documento era importante creo yo mi hermano un hombre muy cuidadoso a sus treinta tantos años y este hombre que está parado en mí en frente dice que no se dio cuenta de donde dejo sus papeles verdaderamente importantes, entonces estoy en problemas, porque en nuestra dualidad como compañeros de cuarto creo yo que sí él no era el responsable entonces estábamos en una encrucijada algo vergonzosa.
—No puede ser, como es que has perdido tus documentos y encima importantes —cuestione con cara de genio aguantado la risa.
—No, no hermano es que, recuerdas anoche, llegue algo mareado, una fiesta ¿tú sabes?, se me paso — respondió con algo de inseguridad.
Entonces divague por unos momentos en el que me puse a pensar: Joder, no puede ser, el señor responsabilidad y solo me lio con mi novia hasta cuando nos casemos, estaba borracho ayer y estaba tan mareado que olvido sus papeles importante, este es un momento épico, necesito una cámara ahora mismo; alardeaba en mi cabeza casi sin control, tanto que desde fuera solté una sonrisa, enseguida lo note me calle e intente ponerme de nuevo serio, para poder seguir discutiendo, mientras mi hermano daba vueltas por mi habitación, incluso se acercó más a mí y toco mi mesa de noche buscando, después de pasar por mi ropa tirada por la habitación, si es que el deposito casi 90% del tiempo era un adorno, mi hermano abrió mi mesa de noche y entonces lo mire con detenimiento y el apenas lo noto, lo cual me pareció muy raro.
— ¡Hey! imbécil que crees que haces, quedamos en que no tocarías nunca mi mesa de noche, y te lo dije no tengo tus papeles, que estas sordo, o aun estas ebrio —preguntaba sin cara de mucho amor fraternal.
—Me importa poco tu regla, necesito estos papeles ahora mismo —respondió mientras seguía buscando para solo toparse con condones y lapiceros gastados.
Entonces me sentí muy extrañado, mi hermano que no era nunca descortés conmigo a pesar de que yo era grosero con él, pues claro en algunas bromas, me respondiese de esa manera me hizo sospechar de que verdad estaba muy asustado y demasiado alterado para comportarse así, pues si bien yo lo he visto muy ebrio, muchas de las veces era mi culpa, nunca estos cinco años que llevamos viviendo juntos, Cristian no era de portarse de esa manera, es más nunca se portó de esa manera hasta este preciso instante.
—Entonces porque se te ocurre buscar en este lugar, si anoche no viniste, estuve despierto cuando llegaste, que por cierto no tenías rostro de haber bebido mucho — le cuestionaba.
No me respondió, se movió a un rincón y prendió mi computador, nuevamente era algo muy extraño de su parte, es más intente recordar que había ocurrido anoche a ver si yo lograba recordar donde estaba dichoso documento, pero no estaba seguro, lo que recordé con mucha claridad es que mi querido hermano no estaba ebrio, incluso que se despidió en la noche de mí con regularidad sin rastro de olor alcohol, me había mencionado de una pequeña reunión mensual, pero era de socios por lo que de un vaso de café no pudo haber pasado, entonces su historia no encajaba y de tan solo de pensar en que mi hermano estaba actuando raro me hizo que me temblara las piernas, me levante de mi cama, me puse las zapatillas dejando a un lado las mugrosas pantuflas que detesto para decirle a mi hermano que de una vez se calme y vaya a buscarlo en su habitación.
—Deja de mirar en mi computadora, para empezar que estas mirando en la pantalla de inicio, o es que también olvidaste la contraseña, genio — le dije con autoridad.
—Sí, lo olvide, puedes decírmela hermanito — me contesto.
Entonces eso me hizo sentir de verdad asustado, pues esa computadora la contraseña había sido escogida por mi hermano, y era muy sencilla era mi nombre Daniel, algo tan básico no era que alguien como mi hermano olvidaría, menos porque esa computadora tenía un mes de haber sido comprada, y era aún más extraño que lo olvidase en un lapso de tan poco tiempo, era cierto que el no usaba mis cosas, pues él tenía su laptop, entonces mi mente formulo algo de muy estúpido, tome uno de mis polos que estaba en el piso, lo enrolle como si de una toalla mojada se tratase, como él estaba sentado en el mueble donde taba la computadora, me acerque tranquilamente, le tire el polo y lo comencé ahorcar no tan fuerte pero si con firmeza, entonces se giró y con una mirada casi asesina se abalanzo sobre mí, tumbándome sobre mi ropa sucia y atacándome, pero el sí muy fuerte, intento tomar mi cuello y hacer lo mismo que yo solo que sin el polo y con una mirada de furia y descontrol.
—Ya conoces la verdad, eres acaso un maldito espía de Tec. Corp. Si eres igual que tu puto hermano, con la fachada de no tengo idea, ah responde desgraciado —
Con sus manos en mi garganta y sin muchas posibilidades, opte por algo muy desesperado le patee donde llegaba a duras penas mis piernas, en la parte baja de su estómago, no debió dolerle mucho pues cuando conseguí apartarme de ese hombre, que por sus palabras parecía no ser mi hermano, aunque físicamente era idéntico con la misma barba afeitada, el rostro ovalado, y las orejas algo grandes, de la misma contextura física,  un hombre normal, de talla alta pero atlética, aunque no muy fuerte, pero este tipo no, este que ahora se sacaba la máscara y decía no ser mi familia era muy fuerte tanto que todavía me dolía mi cuello.
—De que carajos hablas, no tengo idea, Tec. Corp.  de donde has sacado eso, por lo visto no eres mi hermano, pero entonces, quien puñetas puedes ser tú, porque te pareces a él, responde —terminaba gritando para dar énfasis a mis palabras.
—Uhm... no tienes idea, de lo que te acabas de meter, tú y tu hermano están metidos en algo de verdad jodido, más él que seguro ya ha de ser un cadáver, ahora seguirás tú — decía con voz temerosa el prototipo de mi hermano, de su saco sacaba una pistola, una nueve milímetros con silenciador, y lo sabía muy bien pues paso mucho tiempo jugando en mi computadora.
Cuando vi el arma hice lo que cualquier humano haría en mi posición, intentar sobrevivir, como me sentía con mucha adrenalina dado lo que estaba pasando, vi todo de manera pausada, como si el mundo aguardara mi respuesta, pero no era mucho peor que eso, el resulta fue de lo más inesperado, como estaba tumbado en el piso, tome mi estúpida pantufla que casualmente por el ajetreo termino junto a mí, la arroje apuntando a su rostro que para mi suerte acerté como nunca antes, pues si mi ropa estaba toda tiraba era porque yo era un poco malo en reflejos, tal vez era porque ahora mi vida estaba en juego, el tipo disparo a varios lados sin atinarme, aunque estuvo cerca su última bala de ese cargador callo a unos centímetros de donde estaba mi mano,  pero bueno no resulte herido, no por ahora, aguarde unos segundos y vi como el humo salía de la pistola además de que el tipo se sobaba el ojo, mirando que vacío su cargador, se puso a recargar mirándome con mucho desprecio, pero no quería falla esta vez el maldito por lo que se estaba acercado de manera veloz y contundente, pero yo me estaba preparando, esta vez le respondí con mi puño en un golpe muy fuerte, tanto que se le cayó su recarga.
—Mocoso estúpido, pierdo mi tiempo — dijo con cara de indignación para luego marcharse abriendo la puerta de mi habitación.
Con leves pasos me asome a la puerta, no podía creer la escena que se plasma ante mí, toda la casa estaba revolcada, cada cajón  cada maldito rincón estaba hecho un desastre, removido hasta la angustia, sea que lo que ese documento tuviera era muy importante, pero lo que realmente me preocupaba al punto de la desesperación era saber si mi hermano, el verdadero, estaba bien, aunque la situación estaba poniéndose tensa, veía como el sustituto estaba por la puerta aún con la mirada de desprecio. No, esto aún no termina, iré detrás de este malnacido y veré que oculto mi hermano durante este tiempo, espero que ese sustituto sepa.

miércoles, 14 de agosto de 2013

La dama de negro


 Para darles un resumen por sino lo captan del todo, Ariel es un ángel perdido en el tierra debido a una desobediencia, pero esta seguro de poder regresar pues nada lo ata a este mundo, con la fe de llegar al cielo. Por otra parte la dama de negro busca venganza pues Ariel mato a su amante y su único amor, tras un tiempo de seguirle la huella ella encuentra Ariel y acá es donde se desata esta historia que vemos en este vídeo.

martes, 13 de agosto de 2013

viernes, 31 de mayo de 2013

Reseña a Fallout 3

Creepypasta: "niño del vació"

Rincon del Gamer dota 2- morphling

Zalgo: el horror en persona

Zalgo, es una entidad maligna caótica, asociada comúnmente con la locura, la muerte, la destrucción, el miedo y el fin del mundo como lo conocemos.
Una entidad viviendo en otro plano dimensional y que cuando aparece en el nuestro crea el caos, su sola presencia, es capaz de llevar a una persona hacia el vórtice de la locura.
En pocas palabras, Zalgo es...  el horror en persona.
Por más que busques en internet, jamás encontraras una respuesta clara sobre qué es Zalgo, debido a que no existe tal, ya que Zalgo es algo tan terrible, que no existen palabras para describirlo.
A lo mucho, en la mayoría de las veces, encontraras la siguiente descripción:
"Él espera detrás de la pared, en un palacio de cristal torturado, servido por legiones forjadas a partir de las lágrimas de los muertos sin descanso, vestidos con armaduras talladas en el sufrimiento de las madres.
Él es el mente de colmena que confunde a los vivos, y perpetúa la tortura de los condenados, él toma los ojos, la ventana del alma, y elimina la capacidad de sentir cualquier cosa que no sea nada más que dolor, una vez que los ojos son removidos, el alma es removida, el cascaron viviente es el testimonio de la crueldad y la condenación eterna.
No puede ser detenido, así como el miedo no puede ser detenido, es inseparable de la realidad, ya que existe más allá del velo… esperando.
Él espera detrás de la pared delgada que ha construido en su alma, él espera… pero ha de liberarse… y ha de venir.


lunes, 6 de mayo de 2013

Memoria genética


Muchos iconos clásicos del terror, como los Xenomorfos de Giger y Cabeza de Pirámide de Silent Hill, entre otras criaturas inquietantes, comparten rasgos comunes. Piel pálida, ojos oscuros y hundidos, rostros alargados, dientes afilados, y semejantes. Estas imágenes inspiran horror y repugnancia en la mayoría, y lo hacen por una buena razón. Los rasgos que comparten estas imágenes están impresos en la mente humana.
Muchas cosas nos causan pavor por instinto. El miedo es natural, y no necesita ser reforzado para que pueda aterrorizar. Los miedos varían según las especies, y proceden de eras más oscuras en el pasado, cuando un relámpago podría significar la quema de tu casa, un estruendo podría ser el galope de una estampida que se acerca, los depredadores podían esconderse en la oscuridad y las alturas podían hacer de un paso en falso algo letal.
La pregunta que tienes que hacerte es la siguiente:
¿Qué sucedió durante las épocas ocultas antes de que la historia comenzase que podría afectar a la raza humana tan uniformemente como para dar a toda la especie un miedo profundo, instintivo y duradero hacia los seres pálidos de ojos oscuros y hundidos, dientes afilados y rostros alargados?
…Sólo ten cuidado ahí fuera.

martes, 19 de marzo de 2013

El cuadro de la anciana


Los 94 años de mi abuela habían llegado a su fin, la conocí desde muy niño por la razón de que vivíamos en la misma casa. Su herencia claramente estipulaba que aquella casa quedaba a mi nombre, pero que por respeto debía dejar los cuadros y muebles donde estaban.
Siempre que de niño iba al segundo piso a llevarle una sopa a mi abuela cuando estaba enferma, pasaba por el pasillo mirando al suelo para no tener que ver el horrible cuadro colgado en la pared. El cuadro de una anciana de mirada penetrante.
Nadie nunca me contó algo de ella, pero como exigía la herencia, no debía mover el espantoso cuadro de su lugar.
Un día como cualquier otro, me levanté a preparar mi desayuno, y casi me llevo un susto con el cuadro. Veía a la nada con una mirada tan tétrica… parecía que había cambiado el gesto que mostraba normalmente, frunciendo el ceño, como intentando ver algo a lo lejos. Era sumamente espantosa.
En medio del susto, sólo reaccione echándole una sábana encima, que quedó colgando de tal forma que cubría el cuadro. Durante todo el día me pasé por el pasillo sin tener que ver ese rostro mirándome.
Ya al caer la noche, pude escuchar un ruido muy sigiloso. Al salir al pasillo para ver de dónde había provenido el ruido, pude notar que la sábana se había caído. Mi corazón dio un vuelco. Ahora el rostro de la anciana me estaba sonriendo de una manera macabra, mostraba sus malgastados dientes y se notaban exageradas arrugas en su rostro. Realmente no sabía por qué mi abuela apreciaba tanto a ese cuadro, y me intrigaba más que ella no lo encontrara horrible. Fue un martes por la mañana cuando casi me da un infarto por algo que llegué a ver.
Estaba desayunando mi clásico café y empanedado de pollo, al momento que noté una cabeza asomándose por el extremo de la puerta para verme.
Pegué un grito que se debió de haber escuchado en toda la cuadra, a la par que la cabeza se escondió rápidamente. Salí al pasillo a ver qué era lo que había pasado, pero no vi nada: nada aparte de ese horrible cuadro, que de nuevo había cambiado los gestos de su rostro.
Estaba seria.
Yo sabia perfectamente que esa cabeza que había visto era la de esta mujer; no sé cómo, pero había estirado su cuello para vigilar lo que hacía.
La noche siguiente decidí hacer algo más inteligente. Coloqué una cámara delante del cuadro, con la intención de comprobar si era de éste de donde salió la cabeza, o si en verdad el cuadro hacía movimientos extraños. La dejé grabando tres días, en los cuales salí fuera de Lima a otro departamento de mi país. Al tercer día, subí directamente al segundo piso para ver las condiciones del cuadro y de la cámara. El cuadro cambió una vez más, ahora estaba enojada, tenía una expresión llena de rabia y de furia, sus ojos brillaban de odio… ¿por qué?
Pasé a revisar lo que había capturado mi cámara en los tres días que estuve ausente. El primer día no hubo movimiento alguno hasta que cayó la noche, pude ver claramente cómo la cabeza del cuadro miraba a los lados, quizá revisando si había alguien cerca, y después vi cómo estiraba su cuello y salía del cuadro.
El cuello se estiraba y estiraba mientras la cabeza de la anciana recorría todas las habitaciones, curioseando. Cuando finalmente volvió a su postura, cambió su expresión a la de una sonrisa. A la mañana siguiente pude verla repetir el mismo procedimiento, sólo que ahora después de haber vuelto a su posición normal, empezaba a moverse más.
Estaba saliendo del cuadro.
Al salir completamente, vi que era una mujer extremadamente alta, ¡era el doble de mi estatura!; tenía que caminar agachada para no chocar con el techo. Pero su altura no se debía al tamaño de su cuerpo en sí, sino a que su cuello estaba estirado exageradamente.
La anciana se paseó en toda la casa, buscando algo… gritando el nombre de mi abuela mientras sollozaba. Al regresar al cuadro su expresión era una llena de odio —la que mantenía actualmente—.
Fue entonces que me harté. Me decidí por botar ese horrible cuadro; pero justo cuando lo retiré de la pared, la anciana sacó sus brazos a través del cuadro para ahorcarme.
Sus dedos se clavaban en mi cuello a la par que me quitaban el aire, me estaba matando, no podía respirar. Estaba a punto de dejarme vencer cuando me liberé de milagro y arrojé el cuadro. La anciana regresó sus brazos dentro del cuadro y siguió mirándome con odio, ahora desarreglada.
Llamé de inmediato a mi padre para contarle lo sucedido. Sabía que no me creería, pensaría que me estaba drogando… no fue así.
—Hijo, ese cuadro… la anciana de ese cuadro, era tu bisabuela —me dijo mi padre a través del celular que nos comunicaba.
—¿Mi bisabuela? ¡Eso no importa ahora, ¿no escuchaste lo que te dije?!
—Lo sé, es que… ella murió de una manera peculiar —me dijo con dificultad mi padre—. Ella sufría de una depresión horrible. Un día no pudo más con su soledad y se ahorcó.
Esa noticia me impactó. Está bien, que mi bisabuela se ahorcara era algo extraño, y en parte triste, pero ella quiso matarme y me costaba explicarle a mi padre lo que me sucedía. Le iba a colgar y buscar otra solución hasta que me contó una última cosa.
—Lo raro de ese cuadro, hijo, fue que lo pintó tu abuela el mismo día en que tu bisabuela se ahorcó, exactamente antes de que lo hiciera —me explicó mi padre—. Bueno, fue a petición de tu bisabuela que ella lo pintó, pues según ella, a través de ese cuadro la cuidaría mientras viviera de cualquier persona que le quisiera hacer daño… Hijo, ¿hay algo que-
Le corté el teléfono. Fácilmente podría decir que hubo un problema en la linea.
Corrí al pasillo con ligereza. El cuadro estaba vacío, el rostro de mi bisabuela no estaba. Sentí en ese momento una respiración helada a mi espalda. Ahí estaba ella.
La anciana, extremadamente alta, ángel protector de mi abuela. Me miró unos segundos con esos ojos llenos de odio, llenos de maldad, llenos de venganza. Ese cuadro veía todo, lo sabía, estoy seguro de que vio cómo yo le subía a mi abuela una sopa, una sopa cargada de veneno, y cómo hacia caso omiso a los gritos de ayuda que emitía en su agonía.
Ella sabía quién era el responsable de la muerte de mi abuela, y puede que mi abuela lo sospechaba, puede que ésa sea la razón de por qué me demandó en la herencia que mantuviera el cuadro en la casa, puede que…
La anciana empezó a ahorcarme, sentí que mi respiración se cortaba hasta que empecé a escuchar pasos en la casa que se acercaban a las escaleras. Mi bisabuela volvió rápidamente al cuadro con esa expresión de odio en su decrépito rostro. Era mi hermana que llegaba a casa, me había salvado la vida. Le pedí que tomara el cuadro y lo guardara en el sótano.
Y mientras se lo llevaba, pude ver a mi bisabuela haciéndome señas de muerte.
Nunca más volví a entrar al sótano, e incluso años después de estos sucesos, podía escuchar por la noche el ruido de la manija del sótano siendo forzada, en vano, como si alguien quisiera salir de ahí.

miércoles, 27 de febrero de 2013

¿Qué es criptozoología?

La criptozoología es el estudio de animales mitológicos o de dudosa existencia, carentes de pruebas concluyentes pero que el investigador presume se trata de algo real o que por lo general se considera extinto, pero de los que algunos testigos afirman avistamiento ocasiones o experiencias cercanas. Aquellos que estudian o investigan tales animales son llamados criptozoólogos.

La criptozoología debe ser practicada con rigor científico, pero también con una actitud abierta e interdisciplinaria.
Además, se debe también prestar una especial atención al folclor sobres estas criaturas. Aunque suelen estar cubiertas de elementos fantásticos e inverosímiles, estas leyendas populares pueden contener alguna parte de verdad que puede ayudar a guia la investigación de los informes sobre animales inusuales


jueves, 21 de febrero de 2013

¿Qué es un monstruo?


Este es un término que se usa para nombrar a cualquier criatura legendaria, que con frecuencia suele encontrarse en la mitología, las leyendas y los cuentos de terror.
Un monstruo es un ser de apariencia temible y peligrosa, tiene como objetivo matar, destruir y acabar con el medio que lo rodea. El monstruo presenta la desviación de lo que conocemos como "normal y correcto"; simboliza el caos, las tinieblas y todos nuestros miedos más profundos.
Los monstruos existen desde tiempos remotos, y en la mitología griega solían ser los enemigos de los dioses.
Antiguamente era muy común que se les asociaran a tierras desconocida; incluso, en los mapas, las áreas inexploradas eran marcadas, indicando que alguna clase de engendro vivió allí.   
Esta conexión entre estos seres y lo desconocido hizo que la sociedad occidental comenzara a utilizar la ciencia y otras disciplinas académicas para intentar entender este fenómeno.
En la actualidad se representan mucho en el cine, la televisión y en historias de ciencia ficción. 

miércoles, 20 de febrero de 2013

La llorona





La Llorona es un personaje legendario, cuya leyenda se ha difundido por varios países de Hispanoamérica. Se trata de una mujer que pierde a sus hijos y, convertida en un alma en pena, los busca en vano, perturbando con su llanto a los que la oyen. Aunque hay muchas variedades de la historia, los hechos principales son siempre los mismos.
Películas:
La Llorona (1933)
La herencia de la Llorona (1947)
La Llorona (1960)
La maldición de la Llorona (1961), titulada en inglés The Curse of the Crying Woman
La venganza de la Llorona (1974), también llamada El luchador, el pugilista y el fantasma
Las Lloronas (2004)
Kilómetro 31 (2005)
Haunted from Within (2005)
The Wailer (2006) y su secuela The Wailer 2 (2007)
J-ok'el (2007)
The Cry (2007)
La leyenda de la llorona (2011)
Perú
En Perú también se habla mucha de esta historia se dice que es muy vista en la chacras o en los campos los guardianes o los que viven ahí dicen que escuchan lamentos de una mujer llorando pidiendo por sus hijos los guardianes o los vecinos cuando van al lugar donde se escucha los ruidos no se encuentra a nadie y luego oyen como de una voz de ultratumba que les dice: ¿ustedes saben o han visto a mis hijos?
En la televisión
La presencia de la Llorona, o mejor dicho, de una mujer sonámbula a la que confunden con el espectro es común en los programas de televisión de Roberto Gómez Bolaños, Chespirito.
En Estados Unidos, en el episodio piloto de la exitosa serie de televisión Supernatural de WB 
Network, los hermanos Winchester se enfrentan a «La Llorona» (a la que identifican como «The White Lady», la Dama de Blanco). Durante el episodio comentan que en muchos países existe el mismo personaje, con una historia parecida: «Una mujer que llora y grita, por haber matado a sus hijos».
En el noveno episodio de la segunda temporada de la serie Grimm el detective Nick Burkhardt se enfrenta a "La Llorona". Se presenta a La Llorona como una mujer ataviada con un vestido blanco, de pelo negro y que llora junto a los ríos, donde se la ve cuando va a secuestrar niños. En este caso La Llorona es una mujer que ahogó a sus tres hijos (dos niños y una niña de entre siete y diez años) como venganza porque su marido la abandonó por otra mujer, y desde entonces cada noche de Halloween secuestra a tres niños cerca de los ríos y a medianoche los ahoga con el fin de intercambiarlos por sus hijos. Tras hacerlo, a medianoche, desaparece hasta el año siguiente.

domingo, 17 de febrero de 2013

Lamida




Esto paso en una pequeña ciudad de Francia, salió en casi todos los periódicos locales. Una niña de 9 años, hija única, de padres de gran influencia, tenía todo lo que hubiese querido y deseado una niña, pero con una soledad incomparable. Sus padres solían salir a fiestas de caridad y reuniones del ámbito político, y la dejaban sola.

Todo cambió cuando le compraron un cachorro de raza grande, pasaron los años y la niña y el perro se volvieron inseparables. Una noche como cualquier otra, los padres fueron a despedirse de la niña; el perro ya acostumbrado a dormir con la niña, se ponía debajo de la cama.

Los padres se fueron y pronto la niña se sumió en un sueño profundo, aproximadamente a las 2:30 de la madrugada, un fuerte ruido la despertó, eran como rasguños leves y luego más fuertes. Entonces, temerosa, bajó la mano para que el perro la lamiese (era como un código entre ella y el perro) lo hizo y entonces se tranquilizó y durmió otra vez.

Cuando se despertó por la mañana descubrió algo espantoso: En el espejo del tocador había algo escrito con sangre que decía no sólo los perros lamen.
Entonces dio un grito de terror al ver a su perro crucificado en el suelo de su habitación.

Se dice que cuando los padres volvieron estaba totalmente trastornada y solo decía "¿quién me lamió?

El hotel






Un hombre llego aun hotel y fue ala recepción para registrarse la señora le dio la llave de la habitación 17,en camino a ella vio una habitación sin numero le pregunto ala señora que había ay ella dijo que no debía entrar ni ver adentro por el cerrojo,el se iba a acostar pero no resistió la tentación,en la mañana siguiente fue a ver y el miro por el cerrojo vio una habitación común y corriente como cualquier otra solo que en una esquina había una mujer arrodillada con piel total mente blanca con los ojos serrados el iba a abrir la puerta pero se arrepintió y se fue.

Alas horas no resistió y fue haber otra vez y solo vio rojo,el creyendo que la mujer lo vio y tapo la cerradura fue a hablar con la señora ella suspiro y dijo pues como ya viste por el cerrojo tendré que contarte en esa habitación un hombre mato a su mujer el espíritu de ella ronda adentro de la habitación la particularidad de esa mujer que su piel el blanco solo resalta sus ojos de color rojo.

miércoles, 13 de febrero de 2013

Suicide girl


Dale una mirada a la imagen de arriba ,recientemente descubrí esta imagen y su historia en una publicación coreana. La historia es esta, en Japón poco antes de que una adolescente cometiera suicido, dibujo esta imagen, la escaneo y la publico en línea. En Corea esta historia se desato y se esparció como un incendio. 

Hay muchos mensajes recorriendo undefined en foros coreanos que dicen que el espectador se ve inmerso en los ojos azules de la chica, dicen que se puede detectar una pista de odio y tristeza dentro de sus ojos. Tal vez la chica murió con mucha tristeza y enojo que su espíritu embrujo la imagen, o tal vez la imagen provoca tristeza, similar a la canción "Gloomy Sunday" (canción escrita por el pianista y compositor autodidacta húngaro Rezső Seress en 1933 que según la leyenda urbana provoco un gran número de suicidios). 

El elemento raro es este, dicen que es difícil para una persona mantener fija la mirada en los ojos de la chica por más de 5 minutos, hay reportes que algunas personas han tomado sus propias vidas después de hacer esto. La gente dice que la pintura cambia, conforme la ves parece como que una sonrisa burlona aparece en los labios de la chica o que un anillo oscuro crece alrededor de la chica o de sus ojos. 

Algo es seguro, la imagen ha despertado uno curiosidad en mi que debo de saber, siento una presencia cuando miro la imagen, si es malvada o no, no puedo juzgarlo. Me gustaría saber que es lo que la comunidad global en línea siente y tal vez incluso algunos expertos en arte pudiesen responder por qué los ojos de está imagen pueden atraer al espectador tan profundamente. 

martes, 12 de febrero de 2013

Definicion de un creepypasta


¿Qué es un creepypasta?
 Creepypasta es una historia que simula una vivencia real, e infunde terror al leerla. Son historias que buscan perturbar al lector. Usualmente su rating es de M debido a los contenidos explícitos que pueden tener. Dicho de otra forma, un creepypasta es un relato acerca de una experiencia escalofriante que alguien ha tenido diseñado para asustar a todos los que lo lean. Y el hecho de que simula ser real es porque los temas suelen variar entre videojuegos, series de tv, caricaturas, o simples relatos vivenciales. La caracteristica de ellos es que no suelen ser muy largos y bastan esos dos o tres parrafos para ponerte a temblar.
¿Cual es el origen de los creepypastas?
Hasta ahora es desconocido. Aunque las historias para asustar/espantar a los lectores han estado en internet por años, al parecer el arte de escribir creepypastas viene de unos 5 años a la fecha, con origen en el imageboard 4chan.
¿De que tratan generalmente los creepypastas?
Un creepypasta como tal puede ser de lo que sea. La condicion es que las experiencias relatadas no sean muy fantasiosas como hombres lobo que consumen esteroides o vampiros gay. Por lo general los temas mas populares son como ya dije videojuegos, series de television, caricaturas, canciones, o cualquier cosa que sea de la vida cotidana. Sin embargo hay algunos creepypastas que no tienen nada que ver con estos temas, y no por ello dejan de ser creepypastas.
¿Que son los video creepypastas?
Algunos creepypastas vienen acompañados de videos, que sirven para fundamentar lo que se escribe o para espantar aun mas al lector. Si este es el caso, el relato pasa de ser un creepypasta a un video creepypasta.